No encontraremos lugares más tranquilos, silenciosos y apartados del mundanal ruido que los conventos de los monjes cartujos, unos monjes contemplativos cuya orden fomenta el silencio y la oración. Y cerca de Valencia, en plena Sierra Calderona tenemos uno de ellos, la Cartuja de Portaceli (Puerta del Cielo). Y hay que aprovechar esta circunstancia ya que en este momento solo existen 271 monjes cartujos repartidos por 16 cartujas en todo el mundo.
Su lema es que el silencio, unido a la soledad, crea el clima más favorable para la contemplación de Dios, que es la meta de su vida, alejada de la prisa y el bullicio. Y cuando estas aquí puedes entender que han elegido un lugar perfecto para conseguirlo.
El Monasterio no se puede visitar, un letrero colocado en su puerta nos pide que respetemos la soledad de la Cartuja, pero sí que podemos visitar sus alrededores.

Pero si quieres visitar una Cartuja, una que si que se puede visitar es la de Scala Dei, que se encuentra en la comarca del Priorat, en Tarragona. Esta fue la primera Cartuja que se construyó en España y, aunque está en periodo de restauración, se puede intuir, bastante bien, como era el día de día de los cartujos que allí vivían.
Y ahora sigamos conociendo la Cartuja de Portaceli. Esta Cartuja está ubicada en el término municipal de Serra, pero si vienes de Valencia el desvío hacia allí está a la salida del pueblo de Náquera. Ya la carretera que nos lleva al Monasterio nos va a ir mostrando el paisaje que nos vamos a encontrar, adentrándonos cada vez más en la Sierra Calderona.
Dejando el coche en la misma entrada del Monasterio, y después de haber podido observarlo a lo lejos, seguimos por el camino de tierra en el que se convierte la carretera, todo bordeado por cipreses, y pasamos por debajo de un acueducto que en su día llevaba el agua a la Cartuja y así vamos penetrando en estos montes que conozco desde pequeña.

Un letrero nos recuerda que estamos dentro de un Parque Natural y nos indica los kilómetros que quedan para completar la ruta de Portaceli, llegando al «Mirador dels Rebalsadors», desde donde hay bonitas vistas de toda la bahía de Valencia.
Pero nosotros no vamos a realizar la ruta entera, en esta ocasión solo vamos a llegar hasta la» Font del Marge».

Serra tiene numerosísimas fuentes, y en esta zona de Portaceli hay muchas de ellas, la de L´Abella, la del Poll, la del Berro…. Nosotros vamos a ir de la Cartuja de Portaceli a la Font del Marge. Es una media hora de camino por una senda ancha, con cuestas suaves y sin peligro. Perfecta para hacerla con niños.

Antes de llegar a la Font del Marge pasas por la finca «La Pobleta», medio escondida entre la abundante vegetación, y con un depósito de agua de estilo modernista. Esta finca tiene una historia que poca gente sabe, ya que aquí en 1937, en plena guerra civil, vivió Manuel Azaña, Presidente de la II República de España, en la época en la que trasladó su gobierno a Valencia y Valencia fue Capital de la República.
Y no se puede describir mejor el ambiente que aquí se respira que con palabras del propio Manuel Azaña: «En este campo, silencio absoluto, sol mediterráneo, olor a flores. Parece que no ocurre nada en el mundo».

Por el camino te vas encontrando con pinos con extrañas formas debido al capricho del viento y con promontorios horadados por cuevas. Un paisaje peculiar que hace la excursión muy entretenida.


En un recodo del camino y antes de una pronunciada curva a la derecha está la senda que baja a la «Font del Marge». La peculiaridad de esta fuente es que está rodeada de enormes eucaliptos, árbol que no es autóctono de esta tierra y que resulta extraño verlos en estos montes.

Aquí paramos un rato a descansar y a disfrutar de la sombra que dan los eucaliptos y del sonido del agua que brota de la fuente. Esta fuente desagüa en unas pequeñas balsas antes de seguir bajando por el Barranco de Portaceli.


Habiendo llegado al final de la ruta de hoy desandamos lo andado dirigiéndonos de nuevo hacia la Cartuja, donde hemos aparcado el coche. Si quieres puedes volver a salir al camino, que se va empinando cada vez más, hasta llegar a alcanzar el Mirador dels Rebalsadors, o continuar por otra senda que sale frente a la fuente para hacer el «recorrido de las Fuentes» que pasa por la Fuente del Berro, luego por la de la Gota y siguiendo el camino llegas a la Fuente de L´Abella. Tu eliges ruta larga o corta. La Sierra Calderona tiene rutas para todo tipo de excursionistas.

Volvemos sin prisa «paladeando» el paisaje, disfrutando del silencio, descubriendo el tomillo y el romero que cubren el monte y el margalló y el llentiscle tan típicos de esta zona. No es extraño que los cartujos, cuya orden les exige soledad y silencio, hayan elegido estos parajes para «retirarse del mundanal ruido».

…Y vamos llegando a la Cartuja, con sus altos muros, su camino bordeado de cipreses y su acueducto. Y es que cuando paseo por la Sierra Calderona, que como he dicho en alguna ocasión me ha acompañado en mi infancia, en mi juventud y en mi madurez, siempre llego a casa con una sensación de felicidad, de placidez, de «sentirme viva».
Y por eso vuelvo una y otra vez.

No ha sido la primera excursión que os propongo de la Sierra Calderona, ya os expliqué en otro post la Ruta del Poblado Ibérico del «Puntal dels Llops» en Olocau, y la de Serra y el Garbí. pero desde luego que la de hoy no será la última ruta que os proponga de esta Sierra tan cercana a Valencia.
Fantástica explicación. Gracias.
Gracias. Es una zona muy bonita y cercana a Valencia